Ahora, y casi por concluir la licenciatura sabemos que estudiar y hacer danza cuesta mucho esfuerzo fìsico y mental, sacrificios, siempre buscando superaciòn dìa a dìa sin importar que existan lastimaduras o cansancio; por que dejar pasar un dìa sin entrenarse es retroceder, siempre hay que estar en cuerpo y alma a la danza, exigiendo cada vez màs un entrenamiento personal. Es por ello que agradesco a mis profesores por sus enseñanzas, a mis amigas por vivir esta aventura y pasiòn por la danza. Y comparto con ustedes un breve parrafo de lo que cuesta hacer danza, pero que cuando se quiere se puede...
"Poder es perder el miedo a los demás, a las convenciones, para atreverme a hurgar en mis sentimientos, en mis sueños, en mi imaginacion. Poder es creer en mi capacidad de hacer vibrar el aire. Poder es estar a la altura todos los dias para conservar el instrumento de mi poder: mi cuerpo afilado, agudo; es poder sobreponerse al dolor, a las lastimaduras. El sentirse fuerte fìsicamente es sentirse poderosa y capaz de rebasar las fronteras. Pero poder cuesta caro. Poder puede ser renunciar a mucho.
Poder es volverse terriblemete vulnerable, expuesta, y a la vez fabricarse un caparazòn de determinaciòn. Poder se arraiga en la necesidad imperiosa de estar ahì, de tener que realizar esto, vital, imprecindible. Es certidumbre en medio de algunos cauces, sin menospreciar los retos y las trampas, es convicciòn. Es retarse a uno mismo y a sus propios monstruos ( la timidez, el cansancio) y ser el vìnculo de una energìa que nos rebasa. Es abandonarse a otro poder, a una suerte de sentimiento amoroso mayor. Es defender un proyecto y luchar, en primer lugar, contra sì mismo o para sì mismo, y contra y para los demàs."
Lo bailado.. nadie me lo quita
Memorias de una bailarina
Solagne Lebourges
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