La exploración es un concepto que morpho azul pone en práctica en todo momento. De hecho la propuesta de movimiento que tenemos se basa en gran parte en la exploración corporal, en cómo y cuánto conocemos realmente nuestro cuerpo, sus límites y alcances.
La exploración está íntimamente ligada con la investigación y la improvisación, pues al explorar estamos investigando las posibilidades corpóreas propias y hacer ésto no conduce, quizá involuntariamente a una improvisación auténtica.
Seguimos en el camino de la exploración, nadie, ni siquiera nosotros, imaginamos hasta dónde puede llegar el cuerpo si está bien manejado y conducido. Muchas veces el freno lo ponemos nosotros mismos y no nos damos cuenta de que también nosotros podemos quitarlo.
Lo interesante de explorar es dejarse llevar, dejar que nuestra parte Dionisiaca explote, fluya sin freno, no detenernos a pensar en cómo llego, es ir sin programar el regreso, pero sin duda, regresar.
Regresar para registrar lo conseguido, para reflexionar el viaje y planear uno nuevo.
Y nunca dejar de retarnos, de pedir más, porque nunca va a ser suficiente, porque tal vez nunca conoceremos el límite de nuestro cuerpo, y si es así, habremos encontrado una razón más para vivir.
Susana Galindo Aguilar
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